3 motivos para orar a un marido.
En internet puedes encontrar una abrumadora cantidad de buenos blogs, libros y conferencias que animan a las esposas a servir a sus maridos y animan a los maridos a servir a sus esposas con un sentido bíblico junto a sus dones y llamamientos únicos y a orar por ellos con regularidad. Por esa razón hemos hecho este artículo donde encontrarás 3 motivos de peso para orar a un marido.
Pero esto no siempre es un asunto fácil. De hecho, algunas de las cosas por las que orar por un marido son difíciles en sí mismas, en ese caso, visitar este blog donde la oración por mi esposo es tan sencilla como importante puede ser la solución.
Su esposo necesita más que su oración para tener un buen día, tener éxito y caminar con Jesús. Estas no son malas peticiones, sino oraciones generales que no tienen una dirección específica detrás de ellas.
Lo que los maridos realmente necesitan de sus mujeres son oraciones especiales, oraciones intensas por su crecimiento en la piedad. Amar a un esposo desearle lo mejor. Y lo mejor para él es vivir para la gloria de Dios.
3 razones para orar por un marido
1. Arrepentimiento del pecado
Oro para que el Espíritu Santo nunca permita que mi esposo se vuelva leal al pecado en su vida, sino que lo convenza de sus pecados y le recuerde su necesidad de constante arrepentimiento y transformación espiritual.
Una persona arrepentida nunca estará orgullosa. Una persona arrepentida que encuentra la misericordia de Dios en Jesús permanecerá agradecida. Ore para que Dios continúe obrando en el corazón de su esposo, que permanezca sensible al pecado y al Espíritu Santo y continúe en su camino de piedad.
2. Humildad del corazón
Una persona orgullosa se valora demasiado a sí misma, los demás demasiado bajos y ha perdido de vista a Dios. Un esposo orgulloso no estará abierto a la censura o corrección necesarias y se pondrá a sí mismo por encima de los demás.
Pero a una persona humilde se le enseña, independientemente de su temperamento, a obedecer la Palabra de Dios. Oro para que mi esposo continúe creciendo en humildad al seguir a Jesús, y que esta sea una de las marcas más importantes de Jesús en él.
3. Paciencia en la vida
A un marido no le preocuparía mucho que le dijera que es una persona inquieta por naturaleza. Pero la falta de paciencia en una persona es una usurpación de la imagen de Dios en él.
Dios es paciente con nosotros en todas nuestras debilidades y terquedad, y todos debemos vivir vidas que reflejen esta cualidad de nuestro Creador y Redentor.
Y esto es importante porque una persona impaciente se queja rápidamente, se enoja rápidamente y, por lo tanto, es más probable que culpe a los demás e incluso a Dios por lo que le molesta.
Hasta que un esposo haya logrado esto, una de sus mayores necesidades en la vida es aprender a tener paciencia. No solo porque Dios nos ordenó esto, sino porque los niños (y yo) necesitamos que él sea paciente.
Un esposo paciente es una persona que sabe que ha recibido más de lo que merece, que ha disfrutado de la paciencia de Dios durante toda su vida.